viernes, 27 de septiembre de 2013

Nunca dejes de soñar.

“Si quieres puedes, si lo deseas lo conseguirás, tus sueños realidad harás”


Apenas tenía 10 años cuando escuché por primera vez esta frase. Fue en una obra de teatro, de esas que te llevan en el colegio. No recuerdo el nombre de la obra, el curso en el que estaba ni por qué íbamos a ver esa actuación.

Desde entonces no me ha dejado nunca. Siempre ha estado a mi lado, siempre ha estado en mi cabeza. Sinceramente en mi fondo, muchas veces he pensado que es una cursilada, que en mi cosecha personal de frases, consejos, no la habría formulado de esa manera. Pero aun así ahí sigue y más aún, me ha acompañado durante todo este tiempo.

Me la he repetido una y otra vez en diferentes momentos de mi vida, desde en esfuerzos físicos en los que ya no podía más, hasta retos más personales que requerían mucho esfuerzo y no tener en cuenta la realidad.

No sé en su momento por qué me marcó tanto y por qué he podido recordarlo tan bien pese a los años. Con el tiempo, con mi crecimiento, con mi experiencia, con el aprendizaje vital, me doy cuenta de que esa frase tiene mucho que ver conmigo, con mi vida. Claro está, que cuando entonces no tenía ni la menor idea. Pero como decía el gran Steve Jobs, a veces las cosas se conectan de adelante hacia atrás, del futuro hacia el pasado.

Con todo esto quiero hacer hincapié a las ganas de luchar por tus sueños. Era una forma introductoria de contarte uno de mis “secretos” al caminar por los míos. A veces la espera parece eterna, a veces tus objetivos, tus sueños están demasiado lejos y no crees que “tu ahora” sea el camino para llegar. Yo he trabajado mucho para decirme que todo llega y que la espera no es espera si no el ahora, que tengo que aprender a vivirlo y disfrutarlo porque al final, aunque no sea como tú creías, estás formando el camino para llegar a ellos, tus sueños. Me ha costado creer que la vida es sabia.

Nunca dejes de creer que puedes conseguir todo lo que te propongas. Nunca dejes de soñar. Nunca dejes de luchar, de seguir y sobre todo, nunca dejes de vivir.

martes, 10 de septiembre de 2013

Un mundo mejor.

RESPETO

SINCERIDAD                                                

DULZURA

APOYO

Cuatro virtudes que pueden hacer de nosotros alguien "mejor".

Es realmente fascinante vivir así. Es realmente fascinante respetar, porque todos merecemos un respeto, todos somos iguales, cada uno a su manera pero con un mismo origen. Ya no creo que sea cuestión de educación ni mucho menos, es tema de respetarte en primer lugar a ti y en segundo lugar a todos los demás, independientemente de su respuesta, sólo porque el respeto forma parte de tu vida.

De la sinceridad, qué te voy a decir de la sinceridad que ya no sepas. No hay nada mejor que vivir en paz y siendo sincero contigo mismo. Entiendo que a veces las ideas se nos crucen que nos llenemos de emociones, pero amigo, siempre sincero con tus principios, con tus ideas, con tus objetivos y sobre todo con tu presente. El pasado ya pasó y seguro que el resultado eres tú actualmente, y el futuro podemos imaginarlo pero sabes al igual que yo, que es todo incertidumbre.

La dulzura, es mi acompañante más gratificante. Es maravilloso cuando el resto, ese resto que no te ha visto jamás y en un simple instante perciben ese toque de dulzura, eso que a veces llaman especial. Tú te mereces ese cariño, esa forma de quererte.

Y cómo no el apoyo. Siempre he considerado que antes de poder dar, aportar, nada a nadie tienes que tenerlo, portarlo tú. Como vas a decir, apoyar, aportar algo si no lo tienes en ti, sería imposible o al menos nada real. El principal apoyo es el tuyo, tu fiel acompañante en todo eres tú, después puedes serlo de cualquiera que también lo precise.

Fíjate, ya lo decían en tiempo pasados, y pasados, pasados. Todo ha ido evolucionando, “a cada cual mejor” y sin embargo lo esencial sigue siendo lo básico.

Os propongo esta forma de vida.

jueves, 5 de septiembre de 2013

Empezamos.

Una tranquila y adorable vuelta.



En tiempo de desorden, todo es mucho más desordenado. Lejos de una vida de rutina, de monotonía y cerca de mis rincones, de una parte de mi paz, de un desorden incontrolable y cómo no de una felicidad inseparable.

He tenido muy abandonado mi espacio virtual, incluso la tentación me ha llevado a escaparme y  robar un poco de red para escribir. Desconectada durante casi dos meses. Sinceramente agradezco volver a tenerte cerca y agradezco este tiempo separados.

Empieza un nuevo comienzo. Reconozco estar ilusionada y a la vez “cagada de miedo”. Nunca se sabe que va a ser, pero sinceramente estoy tranquila, porque sé que lo que será, será bueno.

Precisamente esta misma mañana una de las personas que desde niña entró en mi camino y en él seguirá hasta el fin de los fines, si es que lo hay, me propuso un debate de lo más interesante. 

Cuestión de creencias, de formas de vida.

“Yo creo que tu forma de vivir, tu forma de creerte a ti en el mundo, de quererte, de confiar en ti y en tu camino, de una forma u otra, la vida, el universo o lo que sea eso que nos une, nos creó y todo esto tan relativo e infinito, te lo devuelve y vuelve a ti en forma de respuesta. Respuesta consecuente con  tu manera de vivir, con tu manera de ver el mundo. Personalmente es algo altamente gratificante."

Así que si, lo que será, será bueno.

Estoy deseando empezar.